El equipo
Divertirse, emprender, crear - ese era el deseo inocente que nos guiaba en 2008 con la apertura de nuestra primera tienda en línea, a la que nunca hubiéramos imaginado un futuro así. Los primeros años de nuestra aventura pasaron muy rápido: desarrollamos otros sitios y gamas de productos, abrimos tiendas en París, ampliamos el equipo, y luego trasladamos una parte a Burdeos.
Pero con el revuelo de los años 2020, nos hicimos muchas preguntas sobre el futuro de nuestra marca y el camino que hemos recorrido hasta ahora, y sobre por qué hacemos lo que hacemos. Y nos dimos cuenta de que el punto en común desde el inicio de nuestra aventura y en cada nueva creación siempre ha sido pasar un buen rato, divertirse. Este deseo, incluso esta necesidad de divertirse, para nosotros, está completamente ligado a la moda, ya que es ante todo para los buenos momentos que queremos vestirnos. Preparar la maleta para las vacaciones de verano, elegir un atuendo para la boda de tu mejor amigo o tomarse el tiempo para crear tu estilo característico – ¡la moda se supone que debe ser divertida! #goodstyleforgoodtimes
Así que, le hicimos la misma pregunta a todo el equipo: ¿qué es un buen momento para ustedes?

Los good times son para mí todos esos pequeños momentos que pasamos solos o acompañados que nos hacen felices. Pueden ser tanto momentos cotidianos como momentos inusuales y espontáneos que nos hacen sonreír.

Tomar un café en una terraza un domingo por la mañana con el periódico, reunirse con amigos para un aperitivo de vino (con moderación) y quesos (sin moderación), montar en bicicleta para un paseo familiar en dos ruedas son parte de mis Good Times.

Para mí, el buen momento rima claramente con convivialidad. En Alemania, no conocemos el aperitivo tal como se celebra en Francia. Reunirse con los amigos alrededor de una buena cerveza fría (sí, soy alemana) y compartir una buena tabla de aperitivos, esos son los buenos momentos para mí.

El buen momento es un momento simple compartido! Con la familia, los amigos o los colegas, por ejemplo, alrededor de una buena comida. Para mí, es realmente una cuestión de compartir e intercambiar.
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Para mí, el buen momento es más un estado de ánimo que un momento en particular: es saber apreciar y disfrutar de momentos simples, a veces rutinarios, así como de encuentros o situaciones más extraordinarias. También es saber tomarse el tiempo para vivir estos momentos, en familia o entre amigos o para uno mismo.

Para mí, el buen momento es uno totalmente improvisado y espontáneo, aquel que no estaba previsto pero que te hace bien y te saca de tu rutina diaria. Puede ser un aperitivo improvisado con amigos, una cena romántica, un almuerzo con una amiga, una escapada de último minuto a la playa...

Para que un momento se convierta en un buen momento, ante todo hay que pasarlo con las personas adecuadas. Ya sea familia o amigos, personas sinceras con las que se puede contar y reír durante horas sin ver pasar el tiempo. Para mí, esa es la base de un buen momento. Pero el entorno también contribuye mucho: ¡un rincón soleado y es lo mejor! Los buenos momentos son aquellos que no vemos pasar, porque preferimos disfrutarlos.